viernes, 21 de octubre de 2011

“¿Habéis visto cuando es feliz un perro?...un perro no es feliz cuando come, es feliz cuando le estas preparando la comida. ¿Sabéis que significa esto?...que la felicidad nunca viene e conseguir algo. La felicidad viene por tener motivos por los cuales levantarse cada mañana.”

Ya desde hace unos meses había visto este post en alguna página de internet mientras buscaba datos para hacer un proyecto de la universidad. Curiosamente, mi hermano, fanático  y seguidor de Emilio Duró Pamiés, me puso un video de este señor en una conferencia  donde hablaba de su teoría del Coeficiente de Optimismo y, por fin,  pude ponerle cara a esta frase que tanto me gustó.

Y es que estoy  totalmente de acuerdo con este personaje. La felicidad es algo que no está en las metas sino en lo que nos motiva a conseguirlas. ¿Y qué es eso que nos motiva?, aquí está lo difícil, porque esta pregunta tan sencilla es muy díficil de responder y para muchas personas la carencia de respuestas se termina convirtiendo en depresiones, amargura, tristeza y apatía.



Existen personas que creen que la felicidad es tener el control de su futuro teniendo una casa propia, un coche, una buena escuela para sus hijos, un trabajo  estable; es decir, la felicidad se traduce para ellos en firmar contratos que te garantizan sicológicamente una seguridad falsa, de por vida. Algo que es falso, por nunca sabes lo que te depara la vida y cuanto dura.

También están aquellas personas que se empeñan en buscar la felicidad en las cosas materiales como dinero, viajes, ropa, casas, muebles, coches…aunque de ellas ya se habla en demasiados lugares y no merece la pena dedicarles un par de palabra más.

Y luego estamos las personas que buscamos la felicidad en las pequeñas cosas: en  envolverte  hasta la cabeza entre unas sábanas que huelen bien, en mirar por la ventana y disfrutar de esas lucecitas que no se distinguen entre casas y edificios, releer por quinta vez ese mensaje tan bonito que esa persona especial te dejo en tu muro de facebook o simplemente en detenerte a saborear un rico brownie de chocolate mientras ves la televisión tirado en el sofá.

No creo que la motivación sea algo que conseguir o que aprender, la motivación es una forma de vida, es despertarte por la mañana y convencerte de que eres feliz porque estás vivo, porque respiras, porque tienes gente que te quiere y porque puedes hacer cosas importantes las siguientes 24 horas...

Os dejo este link  para reflexionar un ratito…y sonreir, joder, que es muy fácil!!